Extrañas imágenes se agolpan en la memoria mientras uno contempla estas huellas talladas, huellas que parecen gigantescas a nuestros ojos pero que aun así son pequeñas comparadas con la personalidad humana de la que son símbolo. Hace dos mil cuatrocientos años, en la soledad de la meditación sobre el dolor y los misterios del ser, la mente de un peregrino hindú alcanzó la mayor verdad jamás revelada a los hombres. En una época yerma de ciencia anticipó el conocimiento supremos de nuestra filosofía de la evolución respecto a la unidad secreta de la vida, las interminables ilusiones de la mente y la materia, y el nacimiento y la muerte de los universos.

Ilustración de Sara Herranz.
Él, mediante el razonamiento puro y mucho antes de nuestra época, encontró respuestas válidas para las cuestiones del » de dónde venimos», «hacia dónde vamos» y «por qué»; y con sus respuestas dio forma a una doctrina más noble que el credo de sus padres. Habló y regresó al polvo; y las gentes veneraron las huellas de sus pies conmovidas por el amor que él había predicado. Mucho después el nombre de Alejandro, el poder de Roma y la gloria del Islam crecerían y menguarían; surgirían grandes naciones que con el tiempo se desvanecerían; las ciudades crecerían y morirían; los hijos de otra civilización, más vasta aun que Roma, someterían la tierra con sus conquistas, fundarían imperios lejanos y finalmente reinarían en la tierra natal del peregrino. Y estos, enriquecidos por la sabiduría de veinticuatro siglos, se maravillaron ante la belleza de su mensaje, y ordenaron que todo lo que él había dicho se pusiera por escrito, en idiomas que aún no habían nacido en la época en la que él vivió y predicó. Sus huellas arden aún en Oriente; y Occidente, maravillado, sigue su brillo en busca de Iluminación Suprema. Incluso entre los antiguos, el rey Milinda siguió el camino a la casa de Nagasena, al principio para preguntar según el sutil método de los griogos y más tarde para aceptar con reverencia el método más noble de su Maestro.
Honestamente, solo entendí hasta el primer punto, aunque fue interesante leer lo consiguiente me sentí debilitado por mí falta de conocimiento en la materia (Budismo), sin embargo, interesado al respecto y convencido que debo leer más (de manera eventual). Bonito blog y Saludos!
Me gustaMe gusta